Informativo Berea :: Noticias de Actualidad http://institutoberea.net/16301.html Fri, 30 Jul 2010 19:53:00 GMT www.cm4all.com http://cgiwsc.enhancedsitebuilder.com/extras/public/blog.cls?accountId=AENDU0IN2KQQ&instanceId=13&action=getImage&img_id=9f9234ba3534e38e5b98909e9719c3f0 Informativo Berea :: Noticias de Actualidad http://institutoberea.net/16301.html 60 30 blog 60 Cómo Vencer el Temor http://institutoberea.net/16301.html?entryId=87584a7758369405d97a67cd9cada1a9#blogstart


El Temor o miedo es una emoción caracterizada por un intenso sentimiento habitualmente desagradable, provocado por la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado. Es una emoción primaria que se deriva de la aversión natural al riesgo o la amenaza, y se manifiesta tanto en los animales como en el ser humano.-

Desde el punto de vista biológico, el miedo es un esquema adaptativo, y constituye un mecanismo de supervivencia y de defensa, surgido para permitir al individuo responder ante situaciones adversas con rapidez y eficacia. En ese sentido, es normal y beneficioso para el individuo y para su especie. Todas las personas experimentamos temor, unos en mayor grado que otros. Sin embargo el temor se vuelve un problema serio cuando en lugar de dominarlo, nos domina y se convierte en pánico.

El temor produce sensación de inseguridad y un estado de angustia interna que puede salirse de control y causar malestar físico en la persona afectada.

Muchas personas bajo el temor liberan su imaginación incontrolablemente a tal punto que perciben cosas extrañas y horrorosas que solo existen en sus mentes. Se imaginan lo peor ante cualquier situación inesperada. Ven con desconfianza a las personas que los rodean. Actúan muchas veces basados en sospechas y pensamientos llenos de peligros infundados. El temor descontrolado produce delirio de persecución y una ansiedad continua. Asociado a este problema se presenta una reacción que coloca a las personas con este trastorno a la defensiva, produciendo muchas veces una visión negativa absoluta de la vida. La persona termina finalmente por no creer ni confiar en nadie, no acepta ni cree que alguien la ama, su comportamiento está basado en la duda y la desconfianza y por eso busca y prefiere el aislamiento. De esta manera se torna en un ser solitario, aislado aun de su propia familia y de sus amigos que no comprenden el drama interno que esta alma vive.

La biblia dice que este tipo de temor negativo, lo genera Satanás sobre el ser humano, con la intención de destruir su fortaleza mental y emocional conduciéndolo así a la infelicidad. Sentirse amado por Dios y por los demás es necesario para vencer el miedo. Saber que Dios no nos deja huérfanos nunca, es importante para eliminar la idea de que estamos solos, abandonados y a merced de muchos enemigos.

En el cristianismo, el temor de Dios es uno de los dones del Espíritu Santo, el cual inspira reverencia de Dios y temor de ofenderlo, y aparta del mal al creyente, moviéndolo al bien. El temor puede ser saludable, hay un temor propio y otro impropio. El temor puede hacer que la persona proceda con la debida cautela frente al peligro y de este modo evite la calamidad; o puede ser mórbido y acabar con la esperanza, lo que debilita la resistencia emocional y puede llegar al extremo de ocasionar la muerte. El temor de Dios es saludable; consiste en un sentimiento de profunda reverencia hacia el Creador, y es un temor sano de desagradarle por el aprecio que se tiene a su amor leal y bondad, y debido también al reconocimiento de que es el Juez Supremo y el Todopoderoso, Aquel que puede castigar o destruir a los que le desobedecen.

Se describen dos clases de temor de Dios: el temor filial y el servil. El temor de Dios filial es aquel por el que se detesta el pecado o se aparta de él, no por las penas con que son castigados los pecadores, sino porque aquello es una ofensa a Dios, algo que le desagrada a Él. Por otra parte, temor servil es el que evita el pecado por la pena que lleva consigo. Es decir, como dice San Basilio, "hay tres estados en los que se puede agradar a Dios. O bien hacemos lo que agrada a Dios por temor al castigo y entonces estamos en la condición de esclavos; o bien buscando la ventaja de un salario cumplimos las órdenes recibidas en vista de nuestro propio provecho, asemejándonos así a los mercenarios; o finalmente, hacemos el bien por el bien mismo y estamos así en la condición de hijos".

Por otra parte, La Biblia precisa qué se entiende por temor del Señor. No se trata de un sentimiento que aturde y agobia, que provoca rigidez mental o pequeñez de espíritu, anulando la voluntad. El temor del Señor nace más bien de la mirada clara que lleva a descubrir que sólo el Señor es digno del servicio del hombre; sus palabras, las únicas a las que se puede hacer caso; sus caminos, los únicos que vale la pena seguir; su ley, la única que merece sumisión. Al mismo tiempo, el Señor es el único ante el cual puede humillarse el hombre. El es el único Señor verdadero, como - de acuerdo al al cristianismo- lo ha demostrado con su inalterable y continua fidelidad a la confianza que los hombres han puesto en él. Solamente de él, y de nadie más, se puede decir que «es clemente y misericordioso, perdona el pecado y salva del peligro» Sin embargo, el temor del Señor es el único camino por el que el hombre llega a ser libre y a liberarse por completo.

El temor de Dios, bíblicamente:
• El temor de Dios trae confianza y seguridad a los que andan en integridad (Proverbios 14:26-27)
• El temor de Dios es aborrecer el mal (Proverbios 8:13)
• El temor de Dios es sabiduria (Job 28:28; Proverbios 1:7; 9:10)
El temor de Dios es una actitud de reverencia y respeto hacia Dios, que pasa progresivamente por las siguientes etapas:
• Una conciencia de que Dios es el dueño de nuestras almas, y tiene el poder de otorgarnos la salvación eterna o condenarnos a la destrucción. Aunque la motivación que genera este temor es completamente egoísta, es preferible a no tener ningún temor de Dios.

• Una conciencia de que Dios está permanentemente mirando todo lo que pensamos, decimos y hacemos, y que El tiene el poder para premiarnos o castigarnos de acuerdo a nuestra conducta; lo cual nos debería motivar a ser cuidadosos y apartarnos del mal.
• Un deseo consciente y permanente de agradar a Dios en todo lo que hacemos y no ofender Su santidad.
• Un reconocimiento humilde de que El es Dios y nosotros somos Sus criaturas, y por lo tanto, El es digno de ser temido y reverenciado.
Recuerda que en el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor. 1ª Juan 4:18
Tu vida necesita ser perfeccionada en el amor de Dios. Ven a Jesucristo en este instante, pues Dios muestra su amor para con nosotros en que siendo aun pecadores, Cristo murió por nosotros. Reciba ahora mismo a Jesucristo como su Señor y Salvador personal. Él te hará libre del temor para siempre.

Oración Para Ser Librado del Temor

¡Oh Señor, cuánto se han multiplicado mis adversarios! Muchos son los que se levantan contra mí. Muchos son los que dicen de mí: No hay para él salvación en Dios. Mas tú, Jehová, eres escudo alrededor de mí. Ven a protegerme de todo poder malo que me acecha. Ven a mi vida, sálvame y escóndame bajo tus alas. Te recibo Jesucristo en mi corazón como mi Señor y mi salvador. Limpia mis pecados con el poder de tu sangre preciosa y acompáñame siempre con tu Santo Espíritu, Amén.]]>
José Omar Tejeiro Ramirez Fri, 30 Jul 2010 19:53:00 GMT 87584a7758369405d97a67cd9cada1a9 http://institutoberea.net/16301.html?entryId=87584a7758369405d97a67cd9cada1a9#comment
¿ Qué Hacer Frente al Dolor ? http://institutoberea.net/16301.html?entryId=313d05ea6247c396b5fc43ddd4b731bf#blogstart
Es en el dolor cuando somos más sensibles, más seres humanos, más hijos de Dios. Nadie quiere sentirse vulnerable y sin embargo es ahí cuando recordamos que no somos Dios, sino seres débiles y mortales.

No es bueno pasar toda la vida llorando, pero tampoco es bueno olvidarnos que el sufrimiento existe, que está ahí, que es real y que nos toca a todos, como el sol que alumbra a buenos y a malos.
El dolor no solo lleva a la auto reflexión, sino que nos conduce de la mano, hasta las manos de Dios. Nos obliga a preguntarnos ¿Qué tengo, qué me pasa? ¿Porqué a mí? ¿En qué me descuidé? ¿Qué debo hacer para estar bien de nuevo? ¿Cuáles son los cuidados que debo tener para sentirme mejor? Todas estas preguntas por sencillas que parezcan son preguntas vitales para nuestra recuperación. Forman parte de nuestra actitud reflexiva ante Dios y ante nosotros mismos.

Los médicos curan, pero Dios nos sana, dice un hermoso letrero a la entrada de una universidad en Bolivia y tal cosa la descubrimos exactamente cuándo nos sentimos adoloridos por algún mal. En el dolor también recordamos que nuestra historia es solo una, entre millones de historias y de personas que sufren peores cosas que nosotros y que la mayoría de veces olvidamos en nuestras oraciones y en nuestra cotidianidad.

Pero en nuestro dolor nos suceden experiencias extremas, una de ellas tiene que ver con Dios quien nos dice: Aunque ande en valle de sombra de muerte,
No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo;
Tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Tengo poder sobre toda enfermedad y tengo la llave de la vida y de la muerte. La otra experiencia extrema tiene que ver con el malévolo Satanás que habla para torturarnos en medio del dolor.

Nos dice que maldigamos a Dios y nos muramos, que es el final, que nuestro mal no tiene remedio, que moriremos abandonados de Dios. Nos grita que el buen Dios nos está castigando cruelmente, que con Dios las cosas son así, no funcionan.

Este ataque al interior de la persona adolorida, que no tenga fe en Dios y en su palabra, puede ser letal, porque en la medida en que el diablo le haga dudar de las promesas de Dios, le quitará el blindaje y la armadura protectora y estará a merced de su perversa y obra destructora.

Las armas de Satanás son la mentira, el engaño y el miedo. Si la persona adolorida lucha y vence las mentiras, el engaño y el miedo manifestado en la cobardía, el terror y el pánico hallara victoria aun en medio del dolor y experimentará una gloriosa predisposición para un milagro de Dios. Este será entonces el dolor y la prueba que se antecede a una manifestación del poder glorioso de Jesucristo.

Si estas en medio de un gran dolor y sufrimiento, no te des por vencido, recuerde que Jesucristo tiene poder para sanar y obrar un milagro en tu vida.

No olvides que Jesús vino al mundo no por los sanos sino por los enfermos, no vino a llamar a justos sino a pecadores al arrepentimiento. Ven a Jesús de Nazaret, no te des por vencido. No te rindas, levántate y anda con el poder de Dios, en el nombre de Jesús de Nazaret.
Sé libre de toda enfermedad y ataque interior por el poder libertador de Jesucristo, recibe ahora el milagro de Dios en tu cuerpo, sobre cualquier enfermedad. Tú puedes ahora actuar apoyado en Dios todo el resto de tu vida.
Busca desde hoy mismo una Biblia y empieza a leer la palabra poderosa de Dios para alcanzar mayor fe en tu vida. Asista a una iglesia donde crean y practiquen la sana doctrina, crean en el bautismo del Espíritu Santo y guarden una vida de santidad para Dios.

Este mensaje está disponible como folleto evangelístico, si usted desea imprimirlo en casa para compartirlo con otras personas, solicite una copia gratis, y con gusto se la enviaremos.]]>
José Omar Tejeiro Ramirez Fri, 30 Jul 2010 19:35:26 GMT 313d05ea6247c396b5fc43ddd4b731bf http://institutoberea.net/16301.html?entryId=313d05ea6247c396b5fc43ddd4b731bf#comment